Raúl Flores Martínez.
Quizá el nombre de Erik Morales, no le dice nada a usted, pero si le agregamos su sobrenombre, podría ponerle los cabellos de punta a varios sicarios y jefes de plaza del Cártel del Golfo, Zetas y Cártel del Noreste en Tamaulipas.
Conocido en Tamaulipas con el sobrenombre de “El Marino Loko”, se podría ubicar más fácil en las redes sociales, este elemento o ex elemento, ya no se sabe de la Armada de México, puso en un momento en jaque a estos grupos delincuenciales en la entidad, hasta hoy nadie sabe dónde se encuentra, algunos dicen que es un mando de la llamada Furia Negra, elementos de élite de la policía de Tamaulipas que han dado muerte a varios sicarios de la llamada Tropa del Infierno, brazo armado del CDN.
Traigo a colación a este elemento de la Armada de México, por algo tan simple, este elemento naval dio golpes certeros contra estos criminales, a tal grado que se comenzó a menguar una parte de estos grupos criminales que tuvieron que echar mano de uno de sus más leales lacayos, el presidente del Comité de Derechos Humanos de Nuevo Laredo, Raymundo Ramos Vázquez.
Este sujeto con financiamiento del crimen organizado, inició una estrategia de movilización de familiares de sicarios levantados o ejecutados por los contras o de sicarios que están vivos, con la finalidad de evitar los operativos de la Armada de México en el estado.
Dentro de estas movilizaciones, se invitó a funcionarios de la CNDH que estuvieron sentados con él en Nuevo Laredo, donde hubo un pequeño apoyo económico para seguir con la estrategia de expulsión de elementos de la Semar de este municipio y del estado.
Ayer en Tamaulipas, la Secretaría Marina-Armada de México pidió una disculpa pública a familiares desaparecidos, supuestamente por elementos de esta institución, según así lo dictan las investigaciones de los funcionarios de la CNDH, esos funcionarios que llegan 5 meses o dos años después de los hechos, y solo se entrevistan con las víctimas que, en muchos casos, al igual que ellos, no distinguen un uniforme pirata y uno original de las Fuerzas Armadas.
Qué mensaje se está dando con esta disculpa pública, qué mensaje se le está dando a los criminales, a esos integrantes de los carteles de la droga que poco a poco van ganando terreno en la sociedad, que poco a poco, tienen más derechos humanos que las propias víctimas.
A las investigaciones realizadas por la CNDH sobre los desaparecidos en Tamaulipas, les hace falta algo sencillo, la comparación de algunas fotografías de unos cuantos desaparecidos con perfiles de sicarios que tienen en sus redes sociales, eso les dará el parámetro de quienes fueron levantados y ejecutados por sus enemigos.
