México.- Talina Fernandez era conocida como “La Dama del Buen decir” por una curiosa razón y así será recordada por siempre.

Una de las conductoras más emblemáticas de la televisión mexicana fue Talina Fernandez,  quien hizo historia con sus entrevistas y programas.

Talina Fernández murió el miércoles 28 de junio a los 78 años de edad tras padecer leucemia.

“La Dama del buen decir” estuvo acompañada de su familia y murió con una sonrisa, según reveló su hijo, Jorge Levy,

También manifestó que Talina Fernández era conocida como “La Dama del buen decir” por su buen sentido del humor.

Pero hay otra historia detrás de este mote, con el cual Talina Fernández fue llamada hasta el último día de su vida.

Talina Fernández

La labor periodística y de conducción de Talina Fernández la llevaron a destacar en la televisión, por lo que trabajó en distintos programas culturales y de entretenimiento.

Este era uno de los programas estelares, donde Talina Fernández compartía espacio con:

  • Paco Ignacio Taibo
  • Horacio G. Velasco

Al trabajar con estas personalidades, Talina Fernández sabía que debía ampliar su vocabulario y evitar decir anglicismos.

Esto lo notó el productor Luis de Llano Palmer, quien comenzó a llamar a Talina “La Dama del buen decir” por su pulcra forma de hablar.

Incluso, Talina Fernández tenía un “regla de oro” al entrevistar, siempre dirigirse a ellos de usted.

Durante una visita a Ventaneando, Talina Fernández reveló que en 54 años de carrera, nunca había dicho una mala palabra al aire a pesar de que era “muy mal hablada”.

A pesar de tener varios programas en horario estelar y ser reconocida en la televisión, Talina Fernández nunca buscó la fama.

Su principal objetivo era tener empleo, pues tras su primer divorcio tenía que mantener a sus tres hijos.

“Yo no me quise hacer famosa, yo lo que quería era tener trabajo para mantener a mis hijos”

TALINA FERNÁNDEZ

La conductora buscó estar activa en la conducción y su último programa fue junto a sus hijo Patricio Levy, llamado “¿Y por qué no?”.

Talina Fernández tenía más planes laborales, pues quería hacer un monólogo teatral con sus amigas y había hecho un podcast junto a su nieta María Levy.