Raúl Flores Martínez.
Hablar de seguridad en un país, donde el crimen organizado encontró el mejor negocio de su vida, es escribir sobre las decenas de muertes que se dan diariamente con la indolencia de un gobernante que no hace el mínimo esfuerzo para terminar de tajo con las organizaciones criminales.
Este día nuevamente se dará a conocer un informe de gobierno del mandatario en turno; sin embargo, estará manchado con la sangre de miles de personas ejecutadas y también con miles de personas que ya no regresaron a su hogar por diversos motivos y tienen el estatus de desaparecidos.
Un informe dónde presumirá de sus logros, logros que no se han dado de manera concreta, cuándo entenderá López Obrador que un informe de Gobierno no es presumir el dinero que ha regalado, sino lo que ha dejado de dañar a la ciudadanía.
Sobre todo, en el rubro de seguridad, ese talón de Aquiles que daña a la población mexicana, de nada sirven los grandes decomisos de droga, cuándo esos delincuentes reponen los miles de millones de pesos de otra manera, ya sea el secuestro o la extorsión.
Pondré un ejemplo que viven los habitantes de Ecatepec y Nezahualcóyotl, dónde algunos son víctimas de los propios policías, quienes han formado una banda delincuencial entre elementos municipales, estatales, ministeriales y ministerios públicos para encarcelar inocentes que no se ponen a mano por las autoridades, cuándo son detenidos de manera injusta.
En los últimos dos años, varias mujeres que se encuentran presas en el Penal Neza-Bordo, tienen condenas de más de 50 años de prisión por el delito de extorsión, casualmente la mayoría son mujeres
El modo de operar de estos efectivos policiacos es detener a las mujeres con supuestas órdenes de aprehensión por delitos que van desde secuestro, narcomenudeo hasta robo; sin embargo, nunca la dejan ver. Una vez aseguradas las víctimas, le ponen precio a su libertad con montos que van de los 25-50 mil pesos que deben ser entregados de forma inmediata, de lo contrario son acusadas y remitidas a las galeras de los mp´s
Una vez ahí, se les da una segunda oportunidad para pagar, ante una negación por falta de dinero, son acusadas formalmente por un elemento de la policía vestido de civil de supuesta extorsión, acusación que es bien cuadrada por los ministerios públicos al grado de que los jueces en turno acusan a las víctimas de delitos que no cometieron
Eso es lo que se debe de cuidar, esas son las situaciones que deben acabarse en un supuesto Estado de derecho, algo que está muy lejano en el Quinto Informe de Gobierno de López Obrador que al igual que otros años, será de cifras alegres y de culpas a sexenios anteriores, será nuevamente un desfile de números y buenas voluntades, mientras la sociedad se hunde en el pozo de la inseguridad.
