Raúl Flores Martínez.
Hace un par de día se suscitó un enfrentamiento entre policías de la ciudad de México y supuestos integrantes de una banda de extorsionadores, quienes exigían el cobro de piso para la romería de Reyes de la calle Sur 16 en la colonia Agrícola Orienta de la alcaldía Iztacalco, una investigación que está hecha bolas.
Resulta que los elementos de inteligencia de la Secretaría de Seguridad Ciudadana, estaban en labores de investigación para detener supuestamente a integrantes de los “Tanzanios” la banda local que opera en esa demarcación e Iztapalapa; sin embargo, tal parece que los únicos detenidos son comerciantes de la vía pública.
No es un secreto que las labores de investigación que hacen algunos elementos policiacos no son las indicadas; también se sabe que la mayoría de organizaciones criminales en la CDMX, tiene en sus filas a elementos en activo de la SSC y Fiscalía capitalina, y en este caso no fue la excepción.
De acuerdo con Rosa María Hernández Amador, uno de los detenidos es su hijo Marco Rodríguez Hernández, quien desde hace 20 años es líder de la Unión de Comerciantes, Ambulantes y Tianguistas Mártires del 1 de Agosto de 1924, organización que desde hace 50 años tiene la romeria de día de Reyes en esta zona de Iztacalco.
Vaya embrollo en los que están metidos los elementos de Seguridad Pública que hicieron la supuesta investigación de inteligencia porque tal parece que detuvieron a comerciantes de vía pública y no al supuesto jefe de los llamados “Tanzanios”, qué a decir de los testigos, “la maña” salió huyendo con apoyo de los mismos policías.
En la actualidad con las diversas detenciones arbitrarias que se han dado a lo largo de la historia reciente y el contubernio de los mismos elementos de las policías con los criminales, cómo saber quién dice la verdad, cómo saber si es o no delincuente o comerciante.
Es necesario que ya definitivamente se profesionalicen las corporaciones policiacas y qué a la vez tengan un salario digno de lo contrarios seguirán formando parte de las filas del crimen organizado, estás filas que al menos en la ciudad de México siguen siendo parte de la Unión Tepito, Tanzanios, Fuerza Anti Unión Tepito, Los Rodolfos, Cártel Nuevo Imperio, Cártel de Tláhuac, Banda de Quintero Muñoz, Los Rorros, Los Maceros, Banda de Don Agus; además de las células del Cártel Jalisco Nueva Generación y Pacífico/Sinaloa.
Así de nutrida es la variedad para la extorsión y delitos de alto impacto, dónde participan algunos elementos en activo de las corporaciones policiacas de la CDMX, policías que cuidan a delincuentes y olvidan a los ciudadanos por unas cuantas monedas.
