Patricia Betaza.
Con el Semáforo en Rojo de riesgo máximo en todo el territorio, México inicia hoy lo que llaman la nueva normalidad. Y mientras las cifras de contagio y de muertos aumentan por el COVID-19, muchos nos preguntamos qué podemos hacer para no decaer el ánimo ni vulnerar nuestro sistema inmunológico. ¿Podemos fortalecernos en esta situación? La respuesta es sí. La clave es la resiliencia.
La maestra Karina Vázquez, psicóloga, terapeuta familiar e hipnóloga dice que el COVID-19 ha provocado crisis de ansiedad, depresión, ataques de pánico, incluso ideas suicidas y miedo. Demasiado miedo. Pero por fortuna hay maneras de evitar caer en esas situaciones poniendo en práctica la resiliencia.
¿Qué es la resiliencia?
Es la capacidad de resurgir ante la adversidad, es poder afrontar una situación difícil o complicada con una actitud positiva. Es la habilidad de trasformar constructivamente una experiencia negativa o algo que nos hace sentir amenazados. Enfrentar un evento traumático y reponerse de él e incluso salir fortalecido. El término de resiliencia se refiere al poder de adaptación del ser humano ante un situación de alto riesgo o a una condición extrema. La resiliencia es la posibilidad de reinventarnos es una nueva forma de concebir la vida y las cosas y de permitirnos ser una nueva persona después de vivir la adversidad.
¿Porqué es tan importante tener resiliencia durante la pandemia?
Es de suma importancia y relevancia mantener una actitud positiva ante el confinamiento, ya que de lo contrario podemos caer en depresión o ansiedad, incluso ataques de pánico, muchas situaciones de miedo y eso obviamente hará que nuestra experiencia durante el confinamiento sea más complicada. Hay que mantener pensamientos claros, precisos y aprovechar estos momentos para no complicarnos, para no generar una situación de mayor problema a la que ya estamos viviendo.
¿Mente sana y cuerpo sano?
Si mantenemos una actitud positiva durante la pandemia tenemos menos posibilidades de enfermarnos. Investigaciones recientes en el área de psiquiatría han identificado la influencia de las interacciones neuroendocrinológicas en las respuestas emocionales de las personas y por consecuencia en la resiliencia. También se ha encontrado que los diferentes neurotransmisores están relacionados, que nosotros los vamos secretando y podemos observar respuestas de ansiedad de miedo y depresión.
En Estados Unidos recientes investigaciones dicen que nuestro cuerpo se enferma a través de lo que nosotros pensamos y que hay respuestas muy especificas de estrés y de miedo que pueden afectar nuestra salud y podemos llegar a enfermarnos. Cuando nosotros nos inmuno-deprimimos, mantenemos pensamientos de miedo o temor, somos más vulnerables de enfermarnos, de bajar nuestras defensas y por eso en este momento es importante mantener nuestro sistema inmune en equilibrio.
¿Cómo fortalecer la resiliencia?
1.-Lo primero que hay que hacer es evitar el consumo de todas las noticias, de todo lo que nos hace daño, evitar la sobreinformación del COVID-19.
2.- Ser flexibles como las palmeras, que cuando vienen huracán o los fuertes vientos, se doblan pero nunca se rompen. Su flexibilidad les permite seguir adelante cuando las cosas ya están en calma. Tomar esta situación con flexibilidad, como una oportunidad de crecimiento, de desarrollo, de preguntarnos cómo queremos ser ante la pandemia, cómo quiero que me recuerden en este momento y preguntarnos si queremos estar en una zona de aprendizaje y de crecimiento.
3.- Cambiar nuestro enfoque, buscar soluciones, resultados positivos, gobernar nuestros pensamientos. Yo les digo a mis pacientes es como si estuviéramos por comer y estamos eligiendo lo que queremos comer, si estuviéramos ante un buffet, cómo elijo, qué elijo.
4.–Buscar un propósito y tener un objetivo de cómo quiero salir de esta situación, cómo me visualizo en esta cuarentena. También pensar en los demás, tener propósito personal y ayudar a alguien más. Buscar actividades que nos gusten, que nos agraden, que nos produzcan placer y también el agradecimiento es muy importante, con los demás, con nosotros mismos, con nuestro Dios, la madre tierra.
5.- Alejarnos de la gente negativa que se queja y que siempre le está viendo el lado malo a las cosas. Compartir con la familia, con los amigos, compartir un nuevo pensamiento, o decirle algo bueno a alguien.
¿Un pesimista puede construir resiliencia?
Sí. Una persona negativa puede transformar su manera de pensar y de sentir . Nosotros tenemos aproximadamente un millón 814 mil pensamientos al día. Esto es medido por impulsos eléctricos. Si una persona se la pasa con pensamientos o con actividad mental negativa va a ser pesimista, enojona y con una actitud negativa ante todo. Lo primero es que esa persona identifique cuáles son esos pensamientos que se repiten continuamente, porque esos pensamientos están generando esa manera de sentir y vivir. Y una vez identificados, se pueden transformar, corregir, modificar para que el sentimiento, la experiencia de esa persona cambie. Hay que tener otra actividad mental.
Desde tu amplia experiencia ¿qué consejos darías para que no decaiga el ánimo en esta pandemia?
Hacer un horario. Levantarnos todos los días a la misma hora, bañarnos, vestirnos con ropa cómoda, no estar en pijama todo el día, porque da la sensación de que no somos productivos. También organizar un lugar especial para trabajar –home office-. Hacer ejercicio: pilates, yoga, baile, pero sí incluir actividad física y hacer pausas en el día para no cansarnos de estar en una sola posición. Ponerse un objetivo diario, semanal y mensual, semestral y anual.
Leer, cocinar, ver películas. Generar nuevos hábitos como tocar un instrumento, incluir un nuevo juego de mesa o investigar un tema. Escombrar nuestra casa, quitar cosas que no utilizamos, pintar, dibujar, orar. Aprender algún idioma. Arreglar plantas, jardín, jugar con nuestras mascotas. Reírnos, ver comedias. Meditar y también descansar.
Hacer lista de cuatro o cinco habilidades y talentos. Y si las reconocemos, podemos ponerlas al servicio de esta pandemia, para salir adelante, fortalecidos con resiliencia.
La maestra Karina Vázquez Salgado da consultas virtuales y su celular es 5528958285 y su correo electrónico: [email protected]
