México.- Las crisis sanitaria que vivió México en 2009, con la influenza H1N1, dejo un gran aprendizaje para la compañías que operaban en ese momento, pues las obligó a reaccionar e innovar de manera inmediata. Un ejemplo de las empresas que se adaptaron fue Avon, que vende productos de belleza por catálogo, que desarrolló gel antibacterial y, que ahora replica la misma práctica para hacer frente al coronavirus.
“Cuando vi que se vislumbraba esta situación no pensé que iba a ser tan grande, fuimos el primer mercado en el mundo levantando la mano para fabricar gel antibacterial y obviamente ampliamos nuestro portafolio de higiene. Ya teníamos una base interesante pero hoy tenemos más de 100 productos de higiene en México y Centroamérica”, señala Magda Ferreira, quien es Vicepresidenta de AVON para Norte y Latinoamérica en entrevista con Forbes México.
El producto estrella es el gel antibacterial, pero también comenzaron a producir jabón líquido antibacterial y shampoo de limpieza en la planta de Celaya, Guanajuato –en vez de maquillaje y perfumería–, con el fin de que sus vendedores dedicados a la venta directa continúen obteniendo ingresos.
“Yo siento que es un apoyo (vender estos productos de limpieza) por lo que estamos pasando, también vendemos cubre bocas y se están vendiendo mucho zapatos cómodos”, señala María Cristina Silva, quien ha vendido productos de esta marca por 45 años, a Forbes México.
Cristina Silva dijo haber reportado bajas en sus ventas y ha estado usando Whastapp para vender sus productos en línea. Por otro lado, vendedoras de Avon en Cosalá, Sinaloa, también han reportado bajas en sus ventas por lo que han recurrido a la misma plataforma de mensajería y a vecinas cercanas.
Las vendedoras aseguran que no existe un número al que deban de llegar en ventas de productos, puede vender lo que quieran y cuando lo necesiten.
Forbes México / Sheila Sánchez