El Papa Francisco anunció el domingo que un resfriado que padece lo obligará a saltarse un retiro espiritual de Cuaresma de una semana con altos funcionarios del Vaticano al sur de Roma que debía comenzar más tarde.
El Papa hizo el anuncio sorpresa a miles de personas en la Plaza de San Pedro durante su primera aparición pública desde el miércoles pasado, cuando fue visto tosiendo y estornudando. El Vaticano ha dicho que sufre de una “ligera indisposición”.
“Lamentablemente, un resfriado me obligará a no participar este año (en el retiro). Seguiré las meditaciones desde aquí ”, dijo.
REUTERS
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