COVID 19, un antes y un después

Fernando A. Mora Guillén*.
  • COVID 19, un antes y un después
  • S&P baja calificación soberana
  • La Banca Mexicana en situación complicada ante la baja operación electrónica

2020 nos sorprendió a todos desde los primeros días de enero, cuando se daba cuenta de un nuevo virus en vías respiratorias surgido en China. Conforme pasaron los meses nos fuimos familiarizando con el Coronavirus; una nueva sepa derivada del virus que en el 2002, conocimos como Sars, aunque en esta ocasión con peculiaridades distintas. 

En tres meses el COVID 19 ha infectado a más de 380,000 seres humanos, cobrando ya más de 25,000 vidas en el mundo. 

Sin duda hay un antes y habrá un después al Coronavirus. Hoy como sociedad hemos tenido que transformar nuestra vida, pasar de la convivencia social al aislamiento, y al desarrollo de usos y costumbres para retomar hábitos sencillos de higiene como: el lavado de mano, el uso de Gel Antibacterial, el estornudo de cortesía, omitir los saludos de mano y beso; ahora nuestros hijos reciben educación a distancia, que todos sabíamos sería el futuro pero no nos adaptábamos a usarla del todo; así como el realizar el máximo de actividades, mediante el uso de las tecnologías de la información a distancia. 

En nuestro país, las autoridades federales mostraron un claro desconocimiento de la situación de crisis que se vive, y han sido las autoridades estatales y municipales, quienes coordinando a la sociedad y apoyándose del sector empresarial, y organizaciones, han logrado emprender acciones de prevención y contención para enfrentar el COVID 19. 

Tras la cuarentena, nuestras vidas habrán cambiado; nuestros usos y costumbres serán distintos, y gracias al esfuerzo de la sociedad podremos salir adelante. Ahora nuestras vidas cambiarán, los tiempos de socializar han quedado atrás, y volveremos al principio de iniciar una nueva vida desde nuestros hogares, con usos y costumbre que nos prevendrán no sólo del COVID 19, sino de muchas otras enfermedades. Nuestras vidas serán otras.

Tómelo con atención.- El pasado jueves la calificadora Standard & Poors, bajó la calificación soberana de nuestro país; se acabó el beneficio de la duda, y tras esta baja serán otras calificadoras las que ratificarán los errores de certidumbre y claridad que el Gobierno Mexicano no ha sabido enviar a inversionistas, y en general al sector financiero internacional.

La cancelación del proyecto de Costellation Brands, en Baja California la semana pasada, dejó en claro que en México no hay certeza jurídica para las inversiones extranjeras; aunado a la cancelación de proyectos como el Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México en Texcoco, y la falta de certeza en el manejo de la política energética, y las finanzas de Petróleos Mexicanos y Comisión Federal de Electricidad. 

En fin, la difícil situación que se avecina para la economía mundial, tras la pandemia por CIVID 19, deja en claro que México tendrá una situación económica muy adversa, y complicada, en los próximos años.

Tómelo con interés.- Uno de los primeros aprendizajes que deja el COVID 19 al sector financiero, es la compleja situación que enfrenta, al tener que recibir en sus sucursales cada día a miles de usuarios que aún no se habitúan al uso de la banca por Internet, y por medios electrónicos. Si bien muchos nos hemos visto sorprendidos con fraudes y el mal uso de aplicaciones ante la delincuencia organizada, en un hecho que en la materia nuestro país está en pañales.

Los bancos han quedado estacionados en una zona de confort, acostumbrados a que el negocio en México sea el cobro de comisiones al realizar operaciones cotidianas en las sucursales bancarias, lo que los ha llevado a no promover el uso de medios digitales. Hoy se enfrentan a ver rebasada su capacidad para atender la demanda de usuarios, ante medidas restrictivas de cuenta habientes en sucursal, y espacios limitados para cumplir con las necesidades que marcan los protocolos de prevención, ante la pandemia por Coronavirus. En este escenario han saturado los servicios de banca telefónica, rebasando por mucho los tiempos razonables para la atención de un cliente, y aún sus plataformas y aplicaciones móviles han quedado rebasadas. Sin duda la banca tendrá que realizar fuertes inversiones en educación bancaria a los usuarios, y en plataformas que soporten la demanda del mercado en México.

Las deficiencias han sido evidentes en Banorte, HSBC, Santander, BBVA y CitiBanamex, entre la mayor demanda, pero sin duda mal de muchos, consuelo de tontos; es evidente que el sistema bancario está rebasado, y ahora pretende justificarse ofreciendo plazos y diferendo a sus usuarios de crédito. 

Twitter: @Fernando_MoraG

Facebook: Fernando Antonio Mora 

*Maestro  en  Comunicación Institucional por  la Universidad Panamericana. 

*Socio Fundador del Colegio Nacional de Licenciados en Periodismo. 

*Presidente de la Fundación Fernando Mora Gómez por la Libertad de Expresión.

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