México.-En México, el sobrepeso y la obesidad en los adolescentes se incrementó en más de un diez por ciento – entre 2012 y 2018- lo que significa que el 38.5 por ciento -prácticamente uno de cada cuatro de los mexicanos entre 12 y 19 años, presentan una de estas dos condiciones.
La desnutrición en niños menores de cinco años aumentó, lo cual se podría agravar por la pandemia de covid-19. Actualmente, por lo menos, 1.3 millones de niños presentan desnutrición crónica.
Una cuarta parte de la población está padeciendo hambre, es decir, hay mexicanos que no tienen que comer.
Lo anterior es resultado del último reporte de la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (ENSANUT) 2018, donde el Director General del Director del Instituto Nacional de Salud Pública, (INSP), Juan Ángel Rivera Dommarco, señaló que la inseguridad alimentaria afecta en mayor medida a las zonas rurales.
“La seguridad alimentaria disminuyó cinco puntos porcentuales en general, pero lamentablemente casi una cuarta parte de la población se encuentra en las formas más graves de la inseguridad alimentaria, es decir, padecen hambre. Hay días que no tienen que comer, esto habla también de una gran inequidad en el país, que se demuestra más en zonas rurales”, detalló.
Con respecto a la desnutrición añadió que este indicador se estancó durante el último sexenio.
“Somos un país que tiene ingresos medios altos y no puede ser que todavía tengamos, el 14 por ciento de nuestros niños que empiezan la vida en desventaja. Esta prevalencia venía ya descendiendo desde 1988, pero de 2012 al 2018, se estancó, no disminuyó, ¡cuidado! la pandemia de covid-19 puede incluso hacer que aumente la desnutrición crónica”, señaló.
En niños menores de 2 años, la lactancia materna exclusiva aumentó casi al doble, al ubicarse en un 28. 6 por ciento, sin embargo esta cifra es insuficiente.
La cobertura con el esquema completo de vacunación al año de edad, fue de 33.6 por ciento, poco más de la mitad que en 2012.
OBESIDAD, SOBREPESO Y ENFERMEDADES NO TRANSMISIBLES SIGUEN EN AUMENTO
De acuerdo a la ENSANUT 2018, también se informó que una de cada tres niñas y niños en edad escolar padecen sobrepeso y obesidad.
Y tres de cada cuatro adultos presentan esta problemática, donde el 76.8 por ciento de la población afectada son mujeres y el 73 por ciento, son hombres.
Mientras que el 17 por ciento de la población no tiene afiliación o acceso de servicios de salud.
Cerca de 3 de cada 10 mexicanos que cuentan con un esquema de protección optaron por la atención privada, con una participación importante de los consultorios aledaños a las farmacias.
El secretario de Salud Jorge Alcocer Varela, añadió que el porcentaje de personas con diagnóstico de diabetes mellitus que se incrementó a 10.3 en 2018. Lo mismo sucedió con la hipertensión arterial que se incrementó a 18.4 por ciento.
“Estos datos que he mencionado reflejan las enormes carencias alimentarias del país, derivadas de décadas de abandono y descuido de nuestro sistema de salud. Durante años se fomentó el consumo indiscriminado de alimentos y bebidas ultraprocesados, sin tomar en cuenta las necesidades reales de cada comunidad y el medio ambiente.
“En pocas palabras, necesitamos transformar a fondo nuestro sistema agroalimentario e incidir en nuestros estilos de vida de la población mexicana a través de la comunicación, social entre otras de las herramientas.
“Es obligación del Estado intervenir al respecto y generar las políticas públicas necesarias para revertir este mal, necesitamos hacer de la salud alimentaria un tema prioritario en la agenda de salud”, indicó.