Francisco Garfias.
El abogado Sergio Arturo Ramírez se fue por la libre. No se coordinó con Rosario Robles, ni con Epigmenio Mendieta –cabeza de la defensa- para hacer declaraciones a los reporteros.
Dio una versión no autorizada de lo que la ex secretaria de estado supuestamente dirá sobre la llamada “Estafa Maestra” a la FGR, en su calidad de testigo protegida.
“Se han hecho declaraciones que no han sido acordadas conmigo. He instruido a mis abogados atenerse al proceso judicial. Lo que sí debo decir es que hablaré con la verdad”, escribió Rosario, en su cuenta de twitter.
Confirmó, de paso, su decisión de acogerse a la figura de “testigo colaborador”.
Su tuit no lo menciona, pero sus abogado nos dicen que es a cambio de que le retiren los cargos de delincuencia organizada y lavado de dinero, que conllevan un mínimo de 40 años de prisión.
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El abogado penalista aseguró que Rosario va tras el otrora poderoso secretario de Hacienda y ex canciller, Luis Videgaray Caso, a quien haría responsable del desvío de recursos públicos hacia campañas electorales del PRI.
Las consecuencias allí están. Un desmentido de Videgaray en el que lamenta que Rosario opte por acusarlo “sin fundamentos”, para tratar de librar su situación legal.
En sus declaraciones, el abogado sostiene que Rosario no tiene nada en contra del ex presidente Peña Nieto, ni del senador del PRI, Miguel Osorio Chong.
Dijo:
“Al ver la maestra la postura de la Fiscalía y la postura de los demás personajes que figuran en este escenario, es que ella toma la decisión de ir contra quien realmente pudiera tener algún tipo de participación o responsabilidad en las parte, sobre todo de las campañas, que es Luis Videgaray”.
Según Ramirez, el ex secretario de hacienda habría dado instrucciones expresas de que se utilizaran recursos para la campaña de Peña Nieto y para la del 2018, con José Antonio Meade como candidato del PRI.
“Al presidente Peña Nieto no se le va a buscar porque no hay ningún tipo de vínculo que llegue por parte de la maestra a él. Todo es directamente Luis Videgaray Caso”, aseveró.
Precisó que es la única persona que podría tener responsabilidad… no sólo en eso, sino en otras muchas otras cuestiones que tienen que ver con el gobierno de Peña Nieto.
“Lo que era notorio es que intentaban cometer nuevamente un fraude electoral, pero no les alcanzó”, puntualizó el letrado.
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Poco después de escuchar las declaraciones de Ramírez nos llegó un whatsAPP de una fuente confiable en el que se leía: “Estimado: Sergio Arturo Ramírez, abogado de Rosario Robles, es cercano a AMLO y a Martí Batres.”
El mensaje venía acompañado de un “link” que me llevó directamente a la página de Facebook del abogado penalista, en la que aparece, de traje, junto a López Obrador.
Fue entonces que busqué a voceros de Robles que me informaron del “problema interno” que provocaron las declaraciones no autorizadas por Rosario Robles.
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En su réplica, Videgaray escribió:
“Lo que dijo el abogado sobre mi es completamente falso, y carece por ello de sustento alguno. Rosario Robles podrá decir muchas cosas, pero lo que no podrá hacer es probar mentiras”.
Luego de subrayar que no tuvo participación alguna en la “Estafa Maestra”, destaca que nunca fue jefe de Rosario. “Como compañeros de gabinete fuimos pares. Nunca hubo relación de subordinación entre nosotros”, aseguró.
Más adelante sostuvo que las ampliaciones presupuestales que recibieron la SEDESOL y SEDATU, o cualquier otra dependencia de la administración pública federal, ocurrieron siempre con estricto apego a la Ley de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria.
Remata aseverando que la estrategia anunciada por el abogado Ramírez es “errada e inmoral” y en nada contribuye a la lucha contra la corrupción que lleva a cabo el presidente.
El ex secretario de Hacienda también fue involucrado en los sobornos de Odebrecht por Emilio Lozoya, otro que se acogió al llamado Criterio de Oportunidad.
“El mecanismo de moda de ‘me salvo culpando a Videgaray’ tiene un límite, y ese límite son la verdad y la ley”, concluyó el ex secretario.
FIN.
