Colombia.- El proceso por presunto fraude procesal contra el expresidente colombiano Álvaro Uribe (2002-2010), que estuvo en detención domiciliaria más de dos meses, dio este viernes un giro con la decisión de la Fiscalía de pedir su preclusión, pero el caso aún no quedará cerrado sino en manos de un juez que será el que decida qué camino seguir.
Uribe -que hasta agosto era senador por el Centro Democrático, partido del presidente colombiano, Iván Duque- tiene más de un centenar de procesos ante la Justicia colombiana por actuaciones que van desde su proceder cuando era gobernador del departamento de Antioquia hasta su Presidencia, pero el caso actual es el más avanzado, aunque paradójicamente sea por un delito de los menos graves.
EFE
Número de vistas 33