A 35 años del terremoto de 1985 y a tres del ocurrido en 2017, la experiencia nos ha mostrado que la solidaridad de la sociedad se antepone a la adversidad. La ciudadanía cuenta con instituciones preparadas ante cualquier contingencia, pues su personal técnico y científico se especializa permanentemente.
Como cada año de los últimos 35, este día es recordado por las y los mexicanos, principalmente por quienes habitan la Ciudad de México (CDMX) debido a los dos fuertes sismos ocurridos coincidentemente en esta fecha. Ambos provocaron daños materiales, decesos y sufrimiento a muchas familias, pero también dejaron ver que la solidaridad de la población está por encima de la adversidad.
El primero, y que mayor daño ocasionó fue el 19 de septiembre de 1985. A las 7:17 horas se originó un sismo de magnitud 8.1 a una profundidad de 15 kilómetros (km) con epicentro en las costas de Michoacán. Sus efectos se sintieron en el centro, sur y occidente del país ocasionando más de 30 mil heridos, 150 mil damnificados, 30 mil viviendas destruidas y más de 60 mil con daños. La cifra oficial fue de 6 mil decesos. Sus afectaciones alcanzaron todos los sectores productivos, salud y de servicios. El total de daños se cuantificó en 4 mil 100 millones de dólares. Este evento fue seguido de un nuevo sismo la noche del día siguiente, a las 19:38 horas. Su magnitud fue de 7.6 y también tuvo gran repercusión para la capital del país, pues colapsó muchas de las estructuras dañadas un día antes.
El segundo de ellos, el 19 de septiembre de 2017. A las 13:14 horas se generó un sismo de magnitud 7.1 con epicentro al noroeste de Chiautla de Tapia en el estado de Puebla a una profundidad de 51.2 km. Los daños más grandes los sufrió nuevamente la CDMX y, en menor medida pero también de consideración, Morelos, Puebla, Estado de México, Guerrero, Oaxaca y Tlaxcala. La Ciudad de México reportó 228 decesos, Morelos 74, Puebla 45, el Estado de México 15, Guerrero 6 y Oaxaca 123. El costo de las afectaciones fue estimado en 61 mil 143 millones de pesos.
A pesar de las adversidades, la sociedad ha sabido demostrar que la unión hace la fuerza. México sigue en pie.
Hoy, gracias a la documentación histórica, la optimización de las redes sísmicas y al análisis puntual de los registros que hacen las instituciones especializadas, podemos conocer más acerca de la frecuencia de este fenómeno natural:
- En los últimos 250 años se han documentado cinco grandes sismos en México, sus magnitudes se situaron entre 8 y 8.6
- Los registros disponibles muestran que en promedio cada diez años ocurre un sismo con magnitud mayor a 7.5
- Cada seis años al menos un sismo es de magnitud igual o mayor a 6.5
- Anualmente se detectan alrededor de 150 sismos con magnitud igual o mayor a 4.5
- Actualmente, el Servicio Sismológico Nacional (SSN) reporta -en promedio- de 50 a 60 eventos diarios, la mayoría de ellos son imperceptibles
Como verás, los sismos son fenómenos comunes y recurrentes en nuestro país, los cuales no se pueden predecir. Por eso es necesario estar bien informados y siempre preparados.
Debido a la contingencia sanitaria por COVID-19, este sábado 19 de septiembre de 2020 NO SE REALIZARÁ EL SIMULACRO al que anualmente convoca la Coordinación Nacional de Protección Civil y autoridades estatales de Protección Civil. La alerta sísimica no se activará salvo que se trate de un sismo real.
En caso de sismo
Prepárate (Antes):
- Elabora tu plan familiar de protección civil
- Ten siempre lista tu mochila de emergencia
- Organiza y participa en simulacros de evacuación
- Identifica las zonas de seguridad en tu casa, escuela y lugar de trabajo
- Revisa constantemente las instalaciones de agua, gas y luz
Actúa (durante):
- Conserva la calma y ubícate en la zona de seguridad
- Aléjate de ventanas y de objetos que puedan caer sobre ti
- Si te encuentras en un automóvil, estaciónate y aléjate de edificios altos, arboles de gran altura y postes
- Si te encuentras en zonas costeras, aléjate de la playa, ríos, arroyos, zonas pantanosas y lagunas; refúgiate en zonas altas
Revisa (después):
- Revisa tu casa después de un sismo para comprobar que no tiene daños que puedan colapsarla
- Utiliza el teléfono sólo en caso de emergencia
- No enciendas cerillos o velas hasta asegurarte que no hay fuga de gas
- Mantente informado, NO propagues rumores y atiende las recomendaciones de las autoridades y Protección Civil de tu estado
- Recuerda que se pueden presentar réplicas, por lo que es importante mantenerte alerta
