México.- Es instrucción del secretario de Agricultura y Desarrollo Rural, Víctor Villalobos Arámbula, trabajar de la mano con el poder Legislativo, gobiernos de los estados y sector productivo para implementar las políticas públicas de soberanía alimentaria, dentro de las cuales la sanidad vegetal juega un papel fundamental en la protección de los cultivos y el incremento en la productividad.
Destacó lo anterior el director en jefe del Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica), Javier Trujillo Arriaga, al participar en el foro virtual “Importancia de la Sanidad Vegetal”, donde precisó que a nivel mundial las pérdidas en la agricultura por plagas y enfermedades ascienden a más de 220 mil millones de dólares anuales, principalmente en países cuyo manejo fitosanitario aún está en ciernes.
En el encuentro celebrado en el marco de las celebraciones de los 120 años de la Sanidad en México y del 2020 Año Internacional de la Sanidad Vegetal, y en el que participó en representación del titular de Agricultura, Trujillo Arriaga puso como ejemplo a más de 40 países africanos, que en los últimos cuatro años han sido impactados por una plaga que en México está ampliamente controlada, el gusano cogollero.
“Hay que mantener la mente abierta y reconocer que, si no se toman las medidas adecuadas, México podría estar incluido en esa estadística”, destacó.
Precisó que alrededor de mil 500 expertos del Senasica trabajan para mantener el estatus fitosanitario de nuestro país, los cuales, además de hacer un trabajo especializado en campo, capacitan a cientos de técnicos de los 32 comités estatales de Sanidad Vegetal.
Invertimos, agregó, alrededor de dos mil millones de pesos cada año en sanidad agrícola, lo cual nos ha permitido contar con laboratorios de diagnóstico de primer mundo y estaciones de vigilancia epidemiológica y cuarentena, aunado al componente científico que aporta el Instituto Nacional de Investigaciones Forestales Agrícolas y Pecuarias (INIFAP) y la academia.
Trujillo Arriaga reconoció la labor de diputados y senadores de las comisiones relacionadas con el sector agroalimentario, de cuyo trabajo se benefician millones de familias de productores, especialmente los de pequeña escala.
Con información de la SADER
