México.- En economía, todas las alarmas están encendidas, México marcha rumbo a una grave crisis económica, tanto o más grave que al final de los gobiernos de Luis Echeverría o José López Portillo, en los 70 y 80 del siglo pasado, advirtió el presidente de Acción Nacional, Marko Cortés Mendoza.
Indicó que el gobierno federal se está quedando sin dinero, está gastando más de lo que recibe, ya no tiene los ahorros acumulados en el pasado, a pesar de lo cual está despilfarrando cientos de miles de millones en obras sin un claro beneficio social. “En otros términos, el déficit fiscal del gobierno en 2021 fue de 472.8 mil millones de pesos, el más alto en seis años y el doble del registrado en 2019”, agregó.
Además, todos los indicadores preliminares señalan que México, otra vez, ya cayó en recesión pues en 2021 no hubo crecimiento económico durante dos trimestres continuos. A ello hay que agregar que las inversiones públicas y privadas se encuentran en el nivel más bajo del presente siglo.
El dirigente nacional del PAN destacó que al gobierno se le están descomponiendo las variables macroeconómicas en el peor momento, ya que ha perdido la confianza de los inversionistas. “Solamente en los últimos dos años han salido del país más de 500 mil millones de pesos que estaban en instrumentos de deuda del gobierno, porque ya no le tienen confianza”.
Para mantener su escandaloso nivel de despilfarro, el gobierno recurre a dos medidas contraproducentes: por un lado, exprime a los contribuyentes y a los consumidores, y por otro, aumenta los impuestos especiales a las gasolinas. “En 2021, el ingreso del gobierno aumentó más de 5 por ciento en términos reales, pero ni así logró captar todo lo que gastó”.
Con los impuestos especiales a las gasolinas, el gobierno pretende captar más de 320 mil millones de pesos durante este año, sin importarle la inflación que provoca. “La inflación no es otra cosa que un impuesto a la pobreza pues afecta más a los pobres. Literalmente, la inflación le arranca el pan de la boca a los más pobres”, subrayó.
Cortés Mendoza dijo que, sin cambios urgentes en las políticas económicas para impulsar la inversión y la generación de empleos, México estará en riesgo de caer en una recesión económica en 2022, por tercer año y, se empeoraría aún más la difícil situación de los mexicanos, especialmente de los más pobres.
En los 3 años de gobierno, hemos visto pérdida de poder adquisitivo, lo que dificulta sustancialmente adquirir la canasta básica a los que menos tienen. Es inadmisible que 4 de cada 10 mexicanos cuentan con salarios que no les alcanzan para comer.
Destacó que la inflación de 7.3 por ciento (la más alta en 20 años) y el recorte del Fondo Monetario Internacional (FMI) a su expectativa de crecimiento para México a 2.8 por ciento en 2022 (muy por debajo de 4.1 por ciento establecido en el Paquete Económico), exigen poner en marcha medidas fiscales contracíclicas que desde el inicio de la pandemia debieron aplicarse.
“Se requiere con urgencia que el gobierno aplique una política fiscal flexible, con estímulos al sector productivo, especialmente a la micro y pequeña empresa, para generar empleos, así como reducir las tasas de interés para incentivar el consumo. De lo contrario, en 2022 México estará en riesgo de caer en una recesión económica con la nefasta consecuencia de que aumentará el número de familias pobres”, explicó.
Consideró que el cambio de estrategia económica es fundamental para que México no siga arrastrando en 2022 la desaceleración que comenzó en el segundo semestre de 2021. De acuerdo con el INEGI, en el tercer y cuarto trimestre del año pasado la economía cayó, con lo cual la economía mexicana cerró el 2021 en estanflación, situación que no se vivía en más de 30 años.
El presidente del PAN recordó que México es la única economía importante de América Latina que no ha recuperado su nivel del Producto Interno Bruto (PIB) previo a la pandemia y experimenta una recuperación frágil, debido a que el gobierno no aplicó una política fiscal contracíclica después.
Finalmente, Cortés Mendoza reprochó la visión retrógrada del gobierno morenista que apuesta todo a los programas sociales sin darse cuenta que, sin un empleo formal, la ayuda económica es insuficiente para lograr una vida digna. “En lugar de gastar los recursos públicos en las obras faraónicas del presidente, deberían de apoyar a los que sí crean empleos y reactivan la economía”.
Con información del PAN
